Impétigo
Impétigo es una infección común de la piel, causada normalmente por el estafilococo aéreo, o bacteria estafilocócica. Algunos casos los causa la bacteria estafilocócica de grupo A, un tipo de bacteria que también puede llevar a tener infección de garganta por estreptococo o fiebre escarlata.
Ciertas cepas de estreptococo que causan impétigo pueden llevar al desarrollo de la enfermedad inflamatoria de los riñones llamada glomerulonefritis. Esta enfermedad puede causar alta presión sanguínea y sangre en la orina.
Signos y síntomas
El impétigo comienza como una llaga pruriginosa de color rojo. A medida que sana, se forma una costra crujiente, de color amarillo o miel sobre la llaga.
Al inicio, el impétigo aparece como una llaga roja que pica. Al sanar, se forma una costra amarillenta o color “miel” sobre la llaga.
El impétigo, por lo general, es una infección leve que puede producirse en cualquier parte del cuerpo. Afecta más frecuentemente a la piel expuesta, como la piel alrededor de la nariz y la boca o de las piernas y los brazos.
Los síntomas incluyen llagas rojas que pican, y que se abren y supuran líquido transparente o pus durante algunos días. Luego se forma una costra amarillenta o color miel sobre la llaga, la cual sana sin dejar cicatriz.
Las llagas suelen aparecer 10 días después de la exposición a estreptococos del grupo A.
Causas
Las bacterias estafilococos y estreptococos son las causantes del impétigo, que consiste en la infección de la epidermis.
Además, tiene una mayor incidencia en verano y situaciones con malas condiciones de higiene, ya que la piel queda más expuesta.
¿Cómo se diagnostica el impétigo?
Por lo general, su médico puede diagnosticar el impétigo tan solo observando su piel o la de su hijo. A veces, su médico extraerá suavemente una pequeña parte de una llaga para enviarla a un laboratorio a fin de identificar la bacteria. Si usted o su hijo tienen otras señales de enfermedad, es posible que su médico indique análisis de sangre o de orina.
Después de tocar la zona, lávese las manos con agua y jabón o utilice un desinfectante de manos a base de alcohol.
Trate de no rascarse las llagas debido a que esto puede propagar la infección a otras partes del cuerpo. Puede ayudar a evitar que su hijo se rasque manteniendo las uñas de su hijo cortas. Puede cubrir las llagas con una venda que no quede apretada. Las llagas necesitan aire para sanar.
Llame a su médico si no mejora como se esperaba o si nota alguna señal de que la infección está empeorando, como fiebre, mayor dolor, hinchazón, sensación de calor, enrojecimiento o pus.
Tratamiento
El tratamiento puede incluir:
Antibióticos
Para una infección leve:
Antibióticos tópicos recetados (p. ej., mupirocina , retapamulina )
Antibióticos tópicos de venta libre (bastante menos efectivos), como neomicina, bacitracina o polimixina
El médico puede recetarle antibióticos orales, como:
Cefalosporina
Penicilina
En algunos casos, las infecciones por estafilococo (p. ej., MRSA) pueden ser resistentes a estos antibióticos. En tal caso, puede ser necesario evaluar otras opciones.
Cuidado de la piel
No toque o rasque las lesiones. Se debe lavar la piel varias veces por día. Use agua y jabón, o un jabón antibiótico. Las costras deberán ser removidas remojando el área infectada con agua caliente por alrededor de 15 minutos. Las lesiones pueden ser cubiertas ligeramente con una gaza, un vendaje o ropa.
Factores de riesgo
Los factores que aumentan el riesgo de padecer impétigo incluyen lo siguiente:
Edad. El impétigo es más frecuente en niños de entre 2 y 5 años.
Contacto estrecho. El impétigo se contagia fácilmente entre familiares, en ambientes concurridos, como escuelas y guarderías, y por participar en deportes en los que hay contacto de piel a piel.
Clima cálido y húmedo. Las infecciones por impétigo son más comunes donde el clima es cálido y húmedo.
Lesiones en la piel. Las bacterias que causan el impétigo generalmente ingresan a la piel a través de un pequeño corte, una picadura de insecto o un sarpullido.
Otras afecciones médicas. Los niños que tienen otras afecciones cutáneas, como dermatitis atópica (eccema), son más propensos a padecer impétigo. Las personas mayores, los diabéticos o las personas que tienen el sistema inmunitario debilitado también son más propensos a contraerlo.
Prevención
Mantener la piel limpia es la mejor manera de que esté saludable. Es importante lavar de inmediato los cortes, las raspaduras, las picaduras de insectos y otras heridas.
Para evitar la transmisión del impétigo a otras personas, sigue estos consejos:
Lava de forma cuidadosa las áreas afectadas con agua corriente y un jabón suave, y luego cúbrela ligeramente con una gasa.
Lava la ropa, las sábanas y las toallas de la persona infectada todos los días con agua caliente y no las compartas con nadie más de la familia.
Usa guantes cuando apliques el ungüento antibiótico y luego lávate bien las manos.
Córtale las uñas al niño infectado para evitar que se lastime al rascarse.
Fomenta el lavado de manos regular y a consciencia, y la buena higiene en general.
Mantén al niño con impétigo en casa hasta que el médico diga que ya no contagia.
Tenemos todo lo que usted puede necesitar, visítenos
Teléfono: +1 (832) 991-8321
Correo-e: medico@clinicahispanawoodforest.com
Sitio web: www.clinicahispanawoodforest.com
Horario: lun – sáb 9AM-9PM dom 9AM-5PM
Dirección: 13415 Woodforest Blvd, Houston, TX 77015